Foto de NeONBRAND en Unsplash |
¿Podríamos afirmar que sin filosofía no tendríamos ciencia? Sin lugar a dudas. La ciencia nace de una inquietud, de un querer saber, de responder a las preguntas del millón ¿porqué? ¿para qué? Tales como ¿por qué al soltarse de una rama, la manzana cae al suelo? ¿por qué si tapamos un fuego, éste se apaga? ¿por qué "sale y se ponen" el sol y la luna? Todas preguntas que se plantean los científicos y que nacen de una búsqueda, de una inquietud, de un interés por saber más. Esta llama por saber más proviene de la filosofía sin duda alguna, aunque la filosofía va más allá, apuntando al sentido de nuestra existencia, nuestra razón de ser, el ser que queremos ser, inquietudes que a todo filósofo que se precie de tal lo desvela. De lo dicho filosofía y ciencia se hermanan, coexisten, se apoyan, se requieren mutuamente.
La paradoja reside que en los tiempos que corren pareciera que lo
hicieran por carriles opuestos, como si no tuviesen nada que ver. Se habla de
que hay que desarrollar más ciencia, que hay que invertir más en ciencia,
mientras en paralelo no faltan los iluminados que plantean la supresión de la
filosofía. Mientras la ciencia “sirve”, porque de sus resultados surge la tecnología,
y de su aplicación, innovaciones que redundarían en un mayor bienestar. Y la
filosofía, muy bien gracias, no serviría para nada, a lo más para hacerse
caldos de cabeza. Olvidan que sin filosofía no hay ciencia en el más estricto
sentido del término porque obvia las preguntas en torno al para qué, a las
consecuencias, las reflexiones respecto de las consecuencias.
Quienes plantean la supresión de los cursos
de filosofía son los mismos que en su tiempo condenaron a Sócrates a beber la
cicuta por corromper a la juventud con sus preguntas y creencias en los tiempos
de Grecia clásica.
No es científico quien esté enfrascado en lo
suyo, en su laboratorio sin un “open mind”, sin mirar lo que pasa afuera, sin
hacerse las preguntas que todo científico, y que como filósofo debe hacerse
¿porqué? ¿para qué? Durante la segunda guerra mundial, había un científico que
estaba en su laboratorio enfrascado en su investigación, sus escritos, sus
ensayos, cuando soldados con sus armas en mano golpean fuertemente su puerta
para arrestarlo por su condición judía. Enfrascado en su investigación,el
científico solo atina a responder “un minuto, ya voy”. Los soldados echan abajo
la puerta y se lo llevan sin que el científico entendiera lo que estaba
pasando. Invito a ver este video:
Entonces los cursos de ética para corrupción serían convenientes?
ResponderBorrarNo entiendo tu pregunta! Ética para corromper? Todo lo contrario! Ética para no corromper a terceros y ética para resistir la tentación de ser corrompido!
BorrarMuy oportuno artículo. Más que hacer alguna pregunta, quisiera confirmar la importancia de la filosofía y de la ética.
ResponderBorrarLa filosofía y su búsqueda incesante de la verdad, del sentido de la vida y de todo lo existente la colocan en una posición privilegiada para profundizar en uno mismo y en comprender no sólo el mundo interno de cada uno, sino también el mundo social, la historia y las posibilidades de desarrollo del ser humano.
Me atrevería a decir que luego de los aportes que hizo Husserl a la fenomenología, es posible que la filosofía se convierta en una verdadera "ciencia del pensar riguroso". Su famoso método de la "epojé" o colocar entre paréntesis algunos temas sin afirmar ni negarlos, permite ir clarificando el propio pensar y descubrir elementos indudables, como por ejemplo que el color y la extensión son interdependientes y en un espacio, el uno no puede existir sin el otro.
Además su "descubrimiento" de la conciencia humana (es decir definir en qué se diferencia de las otras conciencias) como intencionalidad, horizonte, historicidad, intersubjetividad y apertura, son fundamentales para visualizar cómo desarrollar la vida humana.
Sobre la ética que es el segundo curso que sugieres, también me parece muy destacable su búsqueda de la buena acción, de la acción válida y por supuesto importantísima en un mundo en que el oportunismo y "lo que me conviene a mí en un momento dado" tratan de erguirse como la ética del momento, negando al "otro ser humano" y las posibilidades de sentido y de un futuro mejor para todos...
Un saludo para tu amigo aluxemburguesado que te ha inspirado a interesarte en esos muy necesarios temas...