noviembre 21, 2012

Capitalismo a la chilena

Acaba de salir publicado un libro escrito por un economista chileno, Andrés Solimano, quien no hace mucho estuvo en la región conversando con nosotros en torno a las consecuencia que para América Latina tiene la crisis financiera que se vive en el mundo.

Este libro, titulado Capitalismo a la chilena, nos retrata de cuerpo entero. El capitalismo imperante en otros países es un niño de pecho al lado del nuestro, un capitalismo muy sui generis, radicalizado, que no se han atrevido a imponer en otros países ni los desvergonzados derechistas republicanos del tea party en USA. Acá, simplemente matamos, estamos a la delantera, somos la máxima expresión, servimos de modelito, de conejillos de indias.

En efecto, acá, en nuestro querido chilito, en primer lugar, hemos logrado un nivel de privatización de la educación, de la salud y de los fondos de pensiones, sin parangón a nivel mundial. Con el innombrable, hace ya más de 30 años, soltamos amarras, el Estado se batió en retirada para que llegaran los gatos de campo. Solo les faltó privatizar las FFAA.

No obstante que los ideólogos de este modelito hacían gárgaras con la necesidad de impulsar la creatividad, la innovación, el emprendimiento y el aumento en los niveles de competencia, lo concreto, es que hoy tenemos mercados altamente concentrados, oligopólicos, no competitivos. Desaparecieron las pequeñas farmacias de barrio reemplazadas por cadenas de farmacias que se coluden; desaparecieron los bancos regionales o sectoriales (Banco Osorno y La Unión, Banco de Talca, Banco del Trabajo, etc.) absorbidos por bancos supranacionales; están desapareciendo los almacenes de barrio, los pequeños comercios establecidos, las ferreterías, absorbidas por cadenas del retail, hipermercados que bajo distintos nombres aparentan una competencia más falsa que Judas.

En concreto, hoy tenemos menos competencia, no más competencia. No se tiene un capitalismo con muchas empresas que compiten entre sí, sino que por el contrario, un capitalismo corporativo, oligopólico, de grandes empresas y grupos económicos que negocian cuotas de mercado. Todo esto en un contexto político capturado por estos mismos grupos, como lo está demostrando la tramitación de la ley de pesca que por estos días vemos en nuestro congreso nacional, donde parlamentarios con intereses en el sector ni se arrugan.

Como resultado, se tiene que en nuestro país 4 familias acumulan más del 20% del producto interno bruto: las familias Luksic, Paulmann, Matte, y no podía faltar nuestro querido presidente, Piñera.

Revertir este proceso, o al menos detenerlo, era parte de lo que el plebiscito del 88 procuró sin mayor éxito. Los poderes fácticos, el sistema binominal, los quórums calificados, son los sostenedores de este capitalismo concentrador y exacerbado hasta la médula. El resultado no puede ser otro que un país que no se desarrolla, que crece deformemente en base al abuso, un alto nivel de endeudamiento, puestos de trabajo inestables y mal pagados.

Lo que muy probablemente esté en juego en las próximas elecciones presidenciales y parlamentarias, ya no es si queremos un capitalismo o un comunismo, sino si queremos seguir bajo este capitalismo a la chilena o transformarlo, al menos, en un capitalismo competitivo con personas empoderadas, no abusadas y esclavizadas por deudas insostenibles.

noviembre 19, 2012

Nuestro fútbol amateur

En medio de la debacle en que se encuentra el fútbol profesional con motivo de su desempeño en la era Borghi, la Asociación de Fútbol Amateur Villa San Agustín en Talca, celebra en estos días sus 21 años de vida. Ya se encuentra ingresando a la adultez con una fuerte vocación de servicio a la comunidad, promoviendo la práctica del deporte acompañado de importantes acciones sociales. En la actualidad, su cuerpo directivo se encuentra empeñado en alentar la donación de órganos para dar vida a quienes la necesitan.

En el breve lapso transcurrido desde su nacimiento, la Asociación, de estar conformada inicialmente por 8 clubes, hoy cuenta con 15, y con un total de más de 10 mil jugadores afiliados.

El abnegado esfuerzo que realizan los dirigentes del fútbol amateur, merece un reconocimiento, aún cuando no lo reclaman. Reconocimiento por el significativo rol social que desempeñan en un contexto difícil, una realidad que por momentos abruma: el alcoholismo, la drogadicción y la delincuencia, lacras capaces de destruir a nuestra juventud.

Al promover el futbol amateur están alentando el deporte masivo, la ocupación del tiempo libre en actividades que benefician la salud. Un pueblo con más horas de deporte en el cuerpo, goza de una mejor salud, que quienes no lo practican, y demandan menos servicios de salud por ser más sanos. Estamos ante un claro ejemplo de una actividad que genera externalidades positivas, cuyos beneficios van más allá de las personas que practican deportes, benefician a la sociedad en su conjunto. Con un pueblo más sano se requieren menos médicos, menos servicios hospitalarios. Está comprobado que un pueblo más sano tiene una mejor calidad de vida.

Conscientes del rol que juegan las nuevas tecnologías de información y comunicación, la Asociación, con el apoyo de un grupo de estudiantes de la Escuela de Ingeniería en Informática Empresarial de la Universidad de Talca, están diseñando un sitio web que le permita darse a conocer y captar afiliados. En dicho sitio esperan incluir información de la programación de los campeonatos que organizan, de los resultados de los partidos, de los clubes que la conforman y del perfil de los jugadores afiliados.

Los clubes del fútbol amateur operan en un contexto de recursos escasos, con dificultades financieras, pero ello no ha sido obstáculo para su desarrollo. En este plano, el apoyo municipal y el de sus dirigentes, imbuídos de un profundo espíritu de servicio, es esencial. Las necesidades son significativas y urgentes: más y mejores canchas, vestuarios, equipamientos. Silenciosamente, sin escándalos, con la frente en alto, cumplen 21 años de vida. Su desarrollo es esencial para el desarrollo de Talca, de su gente.

noviembre 09, 2012

Un nuevo alcalde para Arica

La elección de Salvador como alcalde en Arica en las últimas elecciones municipales tiene una especial connotación para Arica y para quien escribe estas líneas.

En efecto, para Arica porque representa la otra cara de la moneda que le ha tocado a Arica, al menos en las últimas más de dos décadas. Por desgracia, la corrupción se instaló en el municipio a niveles tales que sus últimos alcaldes han sido objeto de acusaciones y penas vergonzosas. Más de uno ha debido abandonar el cargo antes de su término.

El suscrito le debe mucho a Salvador. Recuerdo aquellos años bajo la dictadura, cuando presidía la Asamblea de la Civilidad en Arica en su calidad de Presidente del Colegio Médico, expresando su rechazo a un gobierno que vulneraba los derechos esenciales de las personas, en tiempos que el temor hacía presa de la mayoría. A sus primeras convocatorias, junto con el recordado Dr. Jaime Barros P.C., asistían unos pocos audaces dispuestos a dar la cara. Su palabra, siempre positiva, lógica, razonable; su claridad de conceptos, de ideas, me hizo involucrarme, siendo ya mayorcito, en la política contingente, un ámbito que siempre observé con interés, pero con aprensión, hasta que Salvador me invitó a implicarme cuando presidía el Partido por la Democracia (PPD) en Arica. Gracias a su capacidad de seducción y sus convicciones, ingresé al PPD y sigo en el partido, aunque él, por poderosas razones, ya no lo está. En síntesis, él es mi mentor.

El sistema binominal, y la caricatura de que Arica sea una región, pero no una circunscripción electoral, impidió que Salvador fuese elegido senador a pesar de haber obtenido la primera mayoría. Gracias a esa derrota, su cariño por Arica, su perseverancia y el respaldo de Arica, hoy lo tenemos como alcalde electo cuando lo necesitamos más que nunca.

Lo necesitamos para que revierta el estado de ánimo. Un estado de ánimo que su sola elección, y el ascenso de San Marcos de Arica a la primera división del futbol profesional, ya ha revertido, pero que se hace necesario sostener sobre bases sólidas. Bases que deberán estar constituidas por la honestidad, la verdad, la responsabilidad, el trabajo bien hecho, prioridades guiadas por el bien común, por las necesidades de los más postergados. No más engaños, no más corruptelas, no más amiguismos. Que el municipio sea la casa de todos. Una casa que escuche, que acoja. Con eso, podemos darnos por satisfechos.

El momento no podía ser más apropiado para el ascenso de Salvador a la alcaldía. Su experiencia en el ámbito público, su experiencia política, y el respaldo obtenido lo colocan en el lugar y el momento propicio. Votaron por él moros y cristianos. Nadie puede apropiarse de su triunfo, solo Arica. Su votación, muy por encima de la alcanzada por los candidatos del PRO a concejales, lo demuestra. Votaron por él quienes adhieren a la Concertación, a la Izquierda y a la Derecha, no obstante que estas fuerzas presentaron candidatos a la alcaldía.

Salvador cuenta con un recurso escaso en el mundo actual y que es esencial a la hora del servicio público: sentido común, sensibilidad social. Por eso se confía en él, por eso, tenemos plena confianza en él.

Por todo esto, y mucho más, tengo la certeza de que vendrán días mejores para Arica.

Formando para innovar

El año 2005, la Universidad de Talca tuvo la audacia de crear una nueva carrera en todo el sentido de la palabra, Ingeniería en Informática Empresarial (IIE), cuyo objetivo es formar profesionales en el ámbito de la gestión y de la informática. A la fecha, las carreras existentes en la disciplina han tendido a formar profesionales en el ámbito de la gestión o de las tecnologías, pero no en ambas, esto es, ser un profesional de la gestión o de la tecnología, sin dejar espacio a la innovación tecnológica en la administración de las empresas.

Desde la segunda mitad del siglo pasado, la gestión empresarial se ha visto sacudida con la incorporación de las tecnologías de la información y comunicación (TICs) que han incrementado significativamente la rentabilidad, la productividad, la eficiencia a niveles que ni sospechábamos.

Habitualmente, el profesional de la gestión desconocía el mundo de las TICs y, el profesional de las TICs no se interesaba por la administración, dirección, organización, planificación empresarial. La fuerza del mercado y de un entorno altamente tecnologizado está forzando a los gestores de las organizaciones a mirar y aprovechar todas las potencialidades y oportunidades que ofrecen las TICs para profundizar y/o ampliar mercados, aumentar la eficacia y la eficiencia con que se desempeñan las empresas en un mundo caracterizado por una fuerte competitividad.

En este plano, no extraña entonces la existencia de una nueva carrera orientada a la formación de profesionales capaces de desempeñarse en la gestión de proyectos, sistemas y procesos con fuertes componentes tecnológicos. Pero lo que más llama la atención de esta nueva carrera es su modelo de formación basado en el desarrollo de competencias, que por definición demanda el trabajo práctico en empresas por parte de los estudiantes. Lo interesante es que los estudiantes de esta carrera, bajo el slogan “formando para innovar”, desarrollan proyectos en empresas desde los inicios de la carrera. Esto permite que sus estudiantes egresen con experiencia laboral real, aumentando su nivel de atractividad, y por tanto, con una pronta inserción laboral de sus egresados en puestos de trabajo para los cuales han estado siendo formados.

Desde su creación en el año 2004, la carrera asumió el proceso de acreditación como un mecanismo que orientaría su accionar. El resultado de este proceso no pudo ser más auspicioso al acreditarse por 5 años, algo inédito en una carrera nueva tanto en su nombre, como en su modalidad de trabajo.

Escribo estas líneas porque la próxima semana, sus estudiantes expondrán en la plaza de armas de Talca, algunos de los resultados de los trabajos que realizan en empresas de la región, y será una linda ocasión para que los estudiantes y egresados de enseñanza media se compenetren de las características de una carrera innovadora que la rompe.