abril 21, 2011

La desconfianza nos está costando cara

Recientemente, la OCDE emitió un informe que desnuda nuestras fortalezas y debilidades. Uno de los logros más significativos de la Concertación, obtenido en las postrimerías del gobierno de Michelle, fue la incorporación de Chile a la OCDE, organismo que agrupa a una treintena de países, entre ellos, los de mayor desarrollo.

Chile es el primer país sudamericano en formar parte de este selecto club y constituye un reconocimiento a la reducción de la pobreza alcanzada en las últimas décadas y al compromiso por lograr el tan esquivo desarrollo al que aspiramos.

Desde hace poco más de un año nuestra presencia en la OCDE nos plantea nuevos y mayores desafíos. Implica cotejarnos con los países de las grandes ligas. y adoptar los correctivos que nuestro país requiere, particularmente en los planos político, social y económico.

En lo político el sistema binominal debe abrirse porque los elegidos cada vez nos representan menos, solo está conduciendo a congelar el padrón electoral, incrementar la apatía ciudadana. Pocos son los jóvenes que se inscriben. Resulta una vergüenza que mientras el sistema político peruano faculta a los peruanos residentes en el exterior a votar, nosotros sigamos excluyendo a nuestros compatriotas que viven en el extranjero y estemos entrampados en condicionamientos con calculadora en mano.

En lo económico se reconocen los esfuerzos por regular la libre competencia y proteger a los consumidores, pero ellos son claramente insuficientes. Existe una sensación muy extendida de indefensión por parte de los consumidores y trabajadores cuyos niveles de estres, tristeza y depresión están por sobre el promedio de los países de la OCDE.

En lo social, nuestra convivencia está marcada por la desconfianza. El nivel de desconfianza en el otro, en nuestro país es más de cuatro veces el promedio existente en los países de la OCDE, desconfianza que tiene su base en la gran desigualdad de ingresos que tenemos, la mayor en toda la OCDE.

La desconfianza nos está costando cara, porque con ella será imposible alcanzar el desarrollo. Y para superar esta desconfianza, necesariamente debemos reducir la brecha de ingresos existente.

2 comentarios:

  1. Anónimo6:05 a.m.

    Rodolfo,
    A la rápida... disculpa, pero no estoy de acuerdo en eso de que ser aceptado en la OCDE sea "Uno de los logros más significativos de la Concertación"... Me pasa que me acuerdo de la calidad de vida en Chile, de su costo, del nivel de los sueldos, de la educación, la salud, de la normativa ambiental, royalty o falta de él, etc., etc., etc...
    O sea, no me cuadra en qué me conviene como ciudadano... a menos que sea ser "únicos" en latinoamérica...
    Un abrazo
    am

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  2. En qué nos conviene? en que nos sube el pelo! Nos plantea exigencias, delata nuestra desnudez (desigualdad), primer paso para emprender el camino hacia el desarrollo, si eso es lo que queremos. Un desarrollo como el que tienen los países desarrollados, particularmente los europeos .....

    saludos,
    rodolfo

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